Pantalla grande, como escenario educativo

El séptimo arte llegó a las comunidades más vulnerables de Soledad, departamento del Atlántico, para fomentar mensajes positivos, valores y una cultura de paz entre los niños y niñas. Más de 300 familias han sido beneficiadas.

06-06-2018
El cine como alternativa de aprendizaje para niños y niñas de Soledad

Más allá de entretener, el cine es una herramienta transformadora. En las comunidades más vulnerables del municipio de Soledad, Atlántico, la ONG World Vision Colombia brinda la posibilidad que los niños y niñas participen del séptimo arte; pero además, se apropien de lo que aprenden en las películas para poder orientar positivamente sus proyectos de vida y el desarrollo de sus habilidades. Es una metodología para convertir el arte en una oportunidad de aprendizaje y de cambio social.

“Ir al teatro nos hace reír pero también nos aporta mucho en nuestras vidas porque nos reunimos y hablamos acerca de las enseñanzas positivas que nos deja”, dijo Maryuris, de 10 años de edad. Como ella, más de 360 menores de 18 años asisten a la proyección de películas y luego, en espacios comunitarios, elaboran tarjetas de aprendizaje y crecimiento personal en las que, a partir de la visualización de imágenes audiovisuales, reflexionan sobre cómo el cine contribuye positivamente en sus vidas, sus familias y comunidades.

Los niños y niñas de Soledad encuentran en el cine una herramienta para fortalecer su escritura.

Algunos, por ejemplo, disfrutaron de su primera vez en el cine, y con base en lo que vieron, hablaron sobre la importancia de fomentar la sana convivencia al interior del hogar, evitar las malas influencias, tolerar la opinión de los demás; y en general, relacionaron los valores que se proyectaron en la pantalla grande con las experiencias que viven en cada uno de sus entornos.

El proyecto continuará implementándose en las diferentes comunidades donde World Vision Colombia tiene presencia, mediante la difusión de mensajes que aportan al proyecto de vida de nuevas generaciones, así como también en la creación de una cultura de paz y no violencia en niños, niñas y adolescentes. “Qué el cine no sea solamente una herramienta educativa sino un escenario para que los sueños de muchas personas se hagan realidad”, mencionó Adriana Lucía, una de las adolescentes que participó de esta iniciativa.

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