MEJORA DE CONDICIONES EN PROCESOS EDUCATIVOS PARA LA NIÑEZ MIGRANTE
Las adecuaciones de aulas, zona de baños y otros espacios propios de cinco instituciones educativas en Norte de Santander, han sido posibles gracias a la intervención de World Vision con el proyecto “La Educación no puede esperar”, la cual cuenta también con el apoyo de Education Cannot Wait.
Este proyecto, el cual cuenta con intervención en nueve departamentos del país, le apuesta al retorno seguro de las niñas, niños y adolescentes a las instituciones educativas, promoviendo su autonomía en el autocuidado y el derecho a la educación. Su enfoque está dirigido principalmente en la población migrante venezolana y de comunidades de acogida que se encuentran en condición de vulnerabilidad y que no pueden acceder a otras ofertas educativas al tener extra edad. Según el reporte de Desescolarización en el Nororiente de Colombia, el 80% de los hogares encuestados que se encuentra fuera del sistema educativo es población migrante y colombianos retornados debido a las barreras de acceso a la educación entre las que se encuentran: cierre de escuelas debido a la COVID-19, falta de documentación para el ingreso a las instituciones educativas, extraedad de los estudiantes, recursos económicos insuficientes y falta de espacios seguros para la niñez.
Ante este panorama, World Vision incrementó sus esfuerzos durante el 2021, dejando como resultado un apoyo integral a más de 340 niñas, niños y adolescentes que lograron exitosamente su retorno a la educación: 163 con el modelo de educación flexible y 185 con la estrategia de permanencia o refuerzo escolar.
Las rehabilitaciones de aulas y unidades sanitarias se enfocaron en la mejora de infraestructura. Se realizaron reparaciones de techos, renovaciones de pintura y equipamientos con materiales propios de cada categoría que permiten espacios seguros y adecuados para el aprendizaje de la niñez y adolescencia.
“Quiero agradecerles en nombre de toda la comunidad educativa, pero sobre todo de parte de las niñas y niños de la institución educativa por la adecuación de esta batería sanitaria. Tenía muchos años de haber sido construida y presentaba varios daños, por eso es maravilloso ver como ahora es un lugar digno para los estudiantes”. Esperanza, coordinadora de la institución educativa de Norte de Santander.
Las metas de ‘La educación no puede esperar’ en el 2022
Uno de los retos para este 2022 es el de continuar apoyando a la población más vulnerable con entregas de kits escolares y de alimentos con el objetivo de promover el desarrollo integral de las niños, niños y adolescentes, a la vez que se apoya a las madres, padres y cuidadores a disminuir sus gastos para el proceso escolar de sus hijas e hijos.
Adicionalmente, el proyecto también contempla el apoyo al cuerpo docente y administrativo de las instituciones educativas por medio de capacitaciones para el desarrollo de los Planes de Gestión del Riesgo, aprendizaje de nuevas técnicas y habilidades de enseñanza enfocados en una pedagogía inclusiva acompañada con una perspectiva de género.
La adecuación de unidades sanitarias, lavamanos y espacios que promueven el plan de saneamiento básico de las instituciones, además de la instalación de puntos de lavado de manos de acuerdo a los protocolos de bioseguridad, hará parte del plan de acción para garantizar el retorno a clases en lugares seguros y adecuados para la niñez.
La rehabilitación de aulas seguirá siendo una prioridad para la organización internacional.
El consorcio financiado por Education Cannot Wait, y conformado por UNICEF, Save the Children, World Vision, Consejo Noruego para Refugiados (NRC) y Fundación PLAN, sigue trabajando de forma articulada para brindar educación a la niñez más vulnerable en nueve departamentos del país promoviendo el retorno seguro a clases.
Sobre World Vision
World Vision es una organización global de desarrollo, ayuda humanitaria y Advocacy (incidencia política y movilización), de principios cristianos, centrada en ayudar a las niñas y niños más vulnerables a superar la pobreza y experimentar la plenitud de la vida, sin distinción política, religiosa, de raza, etnia o género. En Colombia, World Vision tiene presencia nacional hace 43 años, acompañando la infancia y la adolescencia de miles de colombianos, desde dos enfoques: bienestar y protección integral con ternura
